La Unión Tranviaria Automotor no puede resolver sus problemas internos y el enfrentamiento entre dos fracciones del gremio llevó a que durante la jornada de hoy viernes se resintiera el servicio de transporte urbano de pasajeros en la ciudad, además de producirse violentos enfrentamientos entre trabajadores.

La lucha interna en el gremio es de vieja data y tiene su cabecera en la Regional Mar del Plata, de la cual depende Tandil, donde hay un sector que dice haber ganado las elecciones y les corresponde asumir la conducción, mientras que quienes están en el sindicato lo desconocen.

Acá en Tandil, la conducción de Juan Pose dela UTA responde a la fracción perdidosa y, ayer jueves, denunciaron que "nos tomaron la obra social", haciendo alusión a que "un grupo de gente que no es de Tandil se metió en la obra social, parapetándose y no dejando salir que los trabajadores puedan hacer los trámites necesarios".

En las primeras horas de la mañana de hoy viernes, la gente de Tandil anunció un paro de 2 horas (de 8 a 10), pero debido al tono que tomó la confrontación hizo que se extendiera en el tiempo y se resintiera el servicio, por lo cual fueron los tandilenses los que se vieron perjudicados.

Consultados algunos de los empresarios, expusieron que "no dejan salir a los que quieren trabajar, los amenazan le cruzan coches. Esta es gente de Tandil, de la conducción de (Juan) Pose. A los otros no los conocemos. Lo cierto es que se enfrentaron la patota de Tandil con la Mar del Plata y la gente es la que paga".

Nuestro interlocutor, expuso además que "algunas líneas y varios coches salieron después de las 10, pero no están todos porque algunos fueron amedrentados y no salieron. Es de locos".

Los hechos más violentos, se vivieron en 9 de Julio 1557 donde tiene su sede la UTA. Ahí también funciona la obra social, donde en cuyo interior se encuentran "parapetados" a quienes los sindicalistas de Tandil denominan como los "intrusos", los que "tomaron la obra social y no dejan que nuestros compañeros puedan los trámites que necesitan!.

En el lugar se vivieron episodios violentos. Se arrojaron piedras, hubo destrozos de vidrios y las discusiones internas siguieron sin llegar a un acuerdo. La intervención policial hizo que uno de los sindicalistas marplatenses concurriera a la seccional Segunda a prestar declaración.