El proyecto de ordenanza, presentado por los Concejales del Bloque Juntos UCR, establece que todos los edificios en estado de abandono dentro del ejido urbano deberán contar con cerramientos adecuados. Los propietarios tendrán un plazo de hasta noventa días para cumplir con esta normativa, que busca prevenir actividades ilícitas y mejorar la calidad de vida en los barrios afectados.

Impacto en la Comunidad

El estado de abandono de los edificios no solo afecta la estética de la ciudad, sino que también se ha convertido en un problema de salud pública y seguridad. Estos inmuebles son frecuentemente utilizados para actividades ilícitas, como la venta y consumo de drogas, robos y vandalismo. Además, la acumulación de residuos y escombros en estos lugares propicia la proliferación de plagas y roedores, representando un riesgo sanitario significativo.

"Es nuestro deber velar por la seguridad y el bienestar de los habitantes de Tandil," declaró el ingeniero Mario Civalleri, presidente del bloque de concejales Juntos UCR. "Implementar cerramientos adecuados no solo previene el acceso no autorizado, sino que también promueve el mantenimiento y la responsabilidad por parte de los propietarios, incentivando la recuperación y reutilización de los inmuebles."

Detalles del proyecto

La normativa define un edificio en estado de abandono como aquel que presenta signos evidentes de desuso, deterioro y falta de mantenimiento, o que esté deshabitado por más de seis meses consecutivos sin actividad constructiva o comercial visible. Los cerramientos deberán cumplir con las siguientes condiciones:

1. Cercas de al menos dos metros de altura, construidas con materiales resistentes y seguros.

2. Portones o accesos cerrados con mecanismos que impidan el ingreso no autorizado.

3. Otro tipo de infraestructura que garantice el no acceso al inmueble, con previa aceptación de la Autoridad de Aplicación.

4. Mantenimiento regular para garantizar su efectividad y buen estado.

Sanciones y Plazos

Los propietarios de edificios abandonados dispondrán de hasta noventa días a partir de la intimación para proceder al cerramiento correspondiente. El incumplimiento de esta ordenanza será sancionado con multas que oscilarán entre uno y dos salarios correspondientes a la categoría 4 del Agrupamiento Administrativo del Escalafón Municipal. En caso de persistir el incumplimiento, la Municipalidad podrá proceder al cerramiento de oficio, cargando los costos al propietario y aplicando multas adicionales.

Además, el Municipio incorporará un apartado para denuncias a través de TABI, el asistente en línea que funciona en el sitio oficial www.tandil.gov.ar.

 "Queremos enviar un mensaje claro: el abandono y la desidia no tienen lugar en Tandil," agregó Civalleri. "Esta ordenanza no solo busca mejorar la seguridad, sino también fomentar la responsabilidad y el compromiso de los propietarios con su entorno."

La ordenanza entrará en vigencia a partir de su publicación en el Boletín Oficial y contempla excepciones en casos justificados por razones de interés público, proyectos de urbanización o planes de desarrollo urbano aprobados por la Municipalidad.