22 de agosto de 2017
Los héroes, también, atienden en un kiosko. Como el caso del dueño del polirrubro de Avenida Avellaneda, en frente a la YPF, que en el Día del Niño hizo feliz a una nena, que transformó sus lágrimas en una imborrable sonrisa.
La niña y su madre acudieron a los festejos del Día del Niño en el Club Independiente, en moto, la cual dejaron en las cercanías del polirrubro. Al finalizar el evento, la nena volvió hacia el lugar llorando desconsolada porque no había ganado la bicicleta que se sorteó al final de los festejos. Ante esto, el kioskero decidió regalarle unas golosinas para satisfacerla, aunque no fue suficiente. Luego, se enteró el motivo del llanto irreparable. "Vení mañana", dijo el héroe que atiende detrás de un mostrador.
Al otro día, la niña y su madre volvieron al kiosko de Avenida Avellaneda, donde una bicicleta esperaba por ella. El llanto de 24 horas anteriores se convirtió en una sonrisa imborrable que hasta el momento la nena hoy debe tener mientras se divierte pedaleando.
A destacar, el dueño del negocio no quiso darse a conocer ni hablar con la prensa, lo cual hace más grande su gesto.
COMPARTE TU OPINION | DEJANOS UN COMENTARIO
Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de sanciones legales.
Solo suscriptos
Solo suscriptos
10 de mayo de 2025
Solo suscriptos
Solo suscriptos
10 de mayo de 2025
Solo suscriptos
Solo suscriptos
10 de mayo de 2025
Solo suscriptos
Solo suscriptos
10 de mayo de 2025
Solo suscriptos
Solo suscriptos
9 de mayo de 2025
Solo suscriptos
Solo suscriptos
9 de mayo de 2025