A un año de la muerte de Nahuel Tasori, presuntamente asesinado a golpes por la Policía Bonaerense en la Comisaría Cuarta de Tandil, se volvió a pedir justicia.

En aquel momento, Nahuel fue detenido por estar en "estado alterado".  Luego de ser contenido por vecinos, personal policial lo traslado a la Comisaría. Después, fue llevado al Hospital Santamarina, donde perdió la vida.

Ricardo Tasori, padre de Nahuel, le dijo a El Diario de Tandil en el momento de la marcha que "el dolor y el pedido de justicia, te van endureciendo un poco y dándote fuerza. Creía haber perdido la fuerza, es como que se me detuvo el tiempo cuando se murió Nahuel, un chico que crié solo con el hermano".

"Tengo la sensación de que la justicia es lenta, la policía está muy putrefacta en todos los sentidos. Desde que estoy con todo esto, me he encontrado peores casos de muertes y asesinatos dentro de las comisarias, otros que los culpan de ahorcarse, y la policía tiene toda la ventaja", agregó visiblemente angustiado.

Explicó que pudo hablar con el Fiscal Calonge en dos circunstancias, pero "no me da las respuestas que preciso, no me dice nada. Es una persona que habla más de lo que hace. Uno no quiere entrar en discordia con él, pero es lo justo, tendría que estar más preocupado por la violencia institucional, tendría que ver cómo está la Comisaría Cuarta que es un desastre".

 Contó también que hace dos meses estuvo en la Comisaría, y un oficial, sabiendo que era el padre de Nahuel lo quiso llevar como testigo de un allanamiento y que si se negaba tenía que detenerlo. "La policía no está preparada para ver si una persona está ebria o tomó estupefacientes como ellos dijeron de Nahuel. Todo lo que dijeron fue una mentira, cada cosa que dijo la policía, fue todo lo contrario", sumó.

Recordó que el próximo 6 de agosto se realizará la pericia forense por el causal de muerte, pero Ricardo detalló que "por lo que tengo entendido, por otros peritos, el causal de la muerte fue el  fuerte traumatismo frontal de cráneo, tuvo conmoción cerebral, pérdida de conocimiento y hemorragia cerebral".

"Le pegaron fuertísimo, tenía rota la nariz, ambos maxilares golpeados, 25 puntos de golpes, 5 muy internos con rotura de tejido. Además, las esposas metidas un centímetro. No conformes con eso, le sacaron su propio pulóver para atárselo con mucha fuerza. Dijeron que se autogolpeaba y el no podía ni siquiera estar sentado", explicó.