Opinión
10/04/2018
El único día que existe es hoy, y eso no niega el pasado, ni desafía las leyes de la vida o el tiempo, pero el único tiempo que podemos vivir es el presente.
por
María Agustina Jáuregui
Muchas veces nos pasa que parece que repetimos una y otra
vez alguna historia que nos contamos, seguramente relacionada con algo que paso
en nuestra vida, pero no es más que una de las tantas interpretaciones que
podemos darle a eso que nos sucedió o que hicimos.
Como les contaba en mi nota anterior sobre los puntos de
vista, hasta nosotros mismos podemos observar una misma situación e
interpretarla de diferentes maneras y otorgarle distintos significados, y
muchas veces eso depende del estado emocional en el que estemos en ese momento.
En estos días que pasaron estuve leyendo varios textos sobre
el significado de las Pascuas en las distintas tradiciones, y una de las tantas
frases que llamaron de mi atención fue una que decía más o menos así: "Pascua
significa PASO. Y te invito a que nos animemos a dar el PASO que nos haga
pasar: de la resignación a la acción, de la indiferencia a la solidaridad, de
la queja a la búsqueda de soluciones, de la desconfianza al abrazo sincero, del
miedo al coraje de volver a apostar todo por amor, de recoger sin vergüenza los
trozos de los sueños rotos y volver a empezar, de la autosuficiencia a
compartir el fracaso y los éxitos, de hacer las paces con nuestro pasado para
que no arruine nuestro presente y de saber que de nada sirve ser luz, si no
podemos iluminar el camino de alguien."
Cuando leemos todo junto parece como una receta mágica para
la felicidad, pero que bueno sería animarnos a leer una línea a la vez, a dar
un paso a la vez. Dejar de lado el plan completo y pensarlo como pequeños pasos
para una vida más liviana, libre y con sentido. Hasta más feliz.
Si dejo la resignación y me animo a hacer las cosas que
nunca hice, sin duda vamos a obtener resultados que antes no podíamos obtener,
porque sabemos que no haciendo nada, lo que logramos es eso, nada. Y que
haciendo siempre lo mismo, el resultado es el mismo. ¿Porque conformarnos con
eso de siempre y no tomar acciones que nos animen a alcanzar nuevos objetivos?
Dejar la indiferencia, salir de esa burbujita que tiene mis
miedos y mis alegrías, animarme a salir al mundo y ser oferta para otro. No
estamos solos en una isla, no podemos sentarnos a esperar que alguien nos
rescate y solucione nuestros problemas, pero ¿que nos impide en ese mientras
tanto, mirar a los otros y dar una mano? Mientras nos ocupamos de nuestros
asuntos, también podemos ser una sonrisa cálida para quien lo necesite, un oído
empático para quien quiera contarme algo, ser esa palabra de aliento para quien
está a punto de colgar la toalla.
Cuando pueda escuchar a otros, seguramente me dé cuenta que
tal vez mis problemas no sean tan pesados como creía, o tal vez sí, pero si
dejo las quejas y empiezo a buscar soluciones, una a la vez, paso a paso,
seguramente mi energía va a estar mucho mejor invertida.
Quejarnos sin parar sobre algo, no trae soluciones, sino que
nos hace sentir cada día un poco más el peso de eso que nos molesta. Dejemos
ese libro de quejas interno un rato, y pongamos ojo y creatividad para buscar
soluciones, es una paso, solo uno y la diferencia es enorme.
Tantas veces nos hemos sentido traicionados, pero ¿sería
bueno dejar de confiar? ¿Cuantas veces perdemos la confianza en nosotros
mismos? Cuanto mejor sería poder abrazar cada una de nuestras luces y sombras,
aceptarnos completamente, primero a nosotros mismos y después a los demás, a
nuestro entorno, poder descansar sabiendo que así como vos estas ahí, hay
alguien ahí para vos.
Ponerle pausa a los miedos para que no sean ellos quienes
escriban cada una de mis historias, apostar sabiendo que aunque a veces duela
un poco o mucho, eso pasa y siempre es mejor amar. La paz del alma radica en
siempre dar lo mejor de uno mismo, independientemente del resultado, y eso
tiene que ser desde el amor. Conmigo o con algún otro, la música de fondo tiene
que ser amor.
Y si un día tropiezo y mis sueños se rompen?juntar esos
pedacitos y volver a soñar. Porque siempre hay tiempo para un sueño más,
siempre podemos un poquito más, hasta en la noche más oscura, sabemos que otro
día va a llegar.
Como decía antes, no estamos solos. Hay que romper ese
esquema que nos pusieron encima de "yo tengo que poder con todo", porque una
cosa es poder y otra es tener que hacerlo solo. Cuando las cosas se ponen
tristes o no salen como esperaba, puedo compartirlo, no me va a solucionar los
problemas pero va alivianar nuestra carga. Nadie dijo que hay que llevar una
mochila con todo cargado todos los días, también podemos dejar esa creencia de
la autosuficiencia y aprender que somos seres sociales e interdependientes y
eso significa que nos necesitamos. No nos hace más débiles, al contrario, nos
da fuerza. Pero así como compartir las penas nos ayuda a sanar, no perdamos de
vista que compartir las alegrías es mágico, porque las multiplica.
Y si vamos a hablar del pasado, es hora de dejarlo en ese
lugar y dejar de traer cada día aquello que me duele, porque es la mejor manera
que existe de arruinar el presente. Si queremos un presente pleno y feliz, hay
que enfocar la energía en eso que quiero y no en aquello que ya pasó y que ya sé
que no quiero. Es mejor construir el presente que vivir repasando cada momento
de ese pasado que ya fue.
Cuando puedas ver que sos capaz de hacer algo maravilloso,
sea en el ámbito que sea, compartilo. Cuando tengas algo de luz en tu mirada,
no cierres los ojos, abrilos lo más grande que puedas, no sabemos cuándo
alguien va a estar necesitando de esa luz. No te olvides, no estamos solos y
nos necesitamos los unos a los otros, sin dudas podemos mejorar un poquito
nuestro pedacito del mundo.
Es importante dar ese PASO que nos permita saber que pese a
todo siempre el que ama gana. Y que no importa si das un solo paso o veinte,
pero estas haciendo algo para moverte y salir de esa quietud que no ilumina.
Movete y contagia! Empezá hoy y anímate con un pequeño paso.
Gracias.
María Agustina Jáuregui
Coach Profesional Certificada - Directora de Coaching Tandil.
Avalada por la Asociación Argentina de Coaching Ontológico Profesional.
agustinacoach@gmail.com
Envia tu comentario
Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de sanciones legales. Aquel usuario que incluya en sus mensajes algun comentario violatorio del reglamento sera eliminado e inhabilitado para volver a comentar. Enviar un comentario implica la aceptacion del Reglamento
2008 - 2024 © www.eldiariodetandil.com | Todos los derechos reservados