Silvana, encargada del lugar, detalló que les avisaron esta mañana sobre el robo que habían sufrido, por lo que se dirigieron rápidamente al lugar y se encontraron con el triste escenario. Allí, vieron que faltaba, por lo menos, un televisor, un equipo de música y una computadora. Además, se llevaron de la caja registradora unos diez mil pesos que tenían reservados para pagar el alquiler del local.

La señora explicó la peligrosidad del lugar, ya que considera una cuadra sumamente oscura y aseguró que sufre roturas de vidrios constantemente. Afirmó que es la primera vez que le roban con esta magnitud, pero que "trabajamos con miedo". 

A su vez, confirmó que no tiene alarma ni cámaras, aunque sí seguro. Consultó en locales aledaños, pero todos le confirmaron que sus cámaras apuntan a sus propios locales, por lo que probablemente ninguna haya registrado el ilícito hacia la rotisería.