El millonario convenio cuyos fondos aporta el gobierno nacional y que el intendente logró que se firmara luego de la reunión entre el presidente Mauricio Macri y 1800 jefes comunales en Tecnópolis, traza un antes y un después para la Movediza. La noticia tiene una dimensión aproximada a su leyenda líctea en términos de inclusión y calidad de vida para algo más de 5000 vecinos. El barrio de la Movediza ya no sólo tendrá como epicentro histórico la celebridad de su piedra mágica derrumbada, o la presencia de centenares de turistas visitando su alegoría en el cerro homónimo. Ahora y en buena hora les tocó el turno a los vecinos.

Las veredas, las cloacas, el agua, el gas, el cordón cuneta, el arbolado, los espacios verdes y las luminarias de 40 manzanas, todo ese combo de urbanización será concretado en un plazo de dos años a partir del inminente proceso licitatorio. Si una mega obra había soñado Lunghi para coronar su cuarto mandato, aquí la tiene. A todo lo descripto hay que agregarle la construcción de un Salón de Usos Múltiples y un Playón Polideportivo.

Ayer la Piedra se volvió a mover. En el entusiasmo que revela la circunstancial fotografía fuera del acto protocolar, eso mismo parece querer explicarle Lunghi, colmado de énfasis, al ministro del Interior, Rogelio Frigerio, segundos después de la firma del convenio. Abundar sobre esa cadencia oscilante que durante siglos fascinó a propios y extraños y que este viernes pareció recobrar el impulso perdido con el efecto reparador de una gran noticia para todo el vecindario.