Sociedad

Los protagonistas del relato salvaje local y el misterio de quién era el bate de beisbol

16/11/2014

Los hermanos José Enrique y Claudio Martínez fueron quienes le quebraron las dos piernas al policía Gabriel Domeck, en un hecho de una violencia demencial ocurrido ayer por la tarde en Villa Italia. Hay versiones contrapuestas acerca de si bate de beisbol era propiedad del policía o de los que les terminaron fracturando ambas piernas.

La causa del delito se tipificará como “lesiones”, probablemente graves, pero se especulaba ayer que aunque sean citados a declarar, al ser el delito excarcelable, los hermanos seguirán en libertad. Por las dudas, los dos protagonistas de esta historia ya buscaron asesoramiento jurídico en un conocido estudio local, luego de que el episodio tomara estado público. El hecho que produjo estupor en la sociedad cuando trascendió a los medios, aún se enfrenta al misterio del génesis donde comenzó todo. Según una fuente de este portal de noticias –aún faltan conocer los testimonios de los ocasionales testigos del hecho-, el enfrentamiento comenzó en la esquina de Basílico y Quintana, donde se cruzaron ambos automóviles.

Los hermanos José Enrique (“Quique”) y Claudio Manuel Martínez venían en una camioneta Amarok, de color oscura. Tienen a su cargo una empresa llamada “Quique Martínez Contratista de Obras” y viven en calle Urquiza 316 y 320 de Villa Italia.  Doumeck, de 33 años y numerario de la Comisaría Tercera, venía de civil al volante de un automóvil Gol de color negro. Una mala maniobra de alguno de los dos conductores determinó un fuerte cruce de palabras de auto a camioneta, que luego derivó en el enfrentamiento físico en Urquiza al 300.

Lo que resta dilucidar es la secuencia de los hechos –quién llevó la iniciativa de la agresión física- y sobre todo de quién de las tres personas es propiedad el bate de beisbol: algunas fuentes aseguran que en ese momento el policía Doumecq se bajó del auto portando el bate en cuestión. Otras fuentes cuentan exactamente lo contrario. Lo cierto es que la aparición del contundente objeto precipitó el traumático final para el joven uniformado. Los Martínez son dos hombres corpulentos y morrudos, y uno de ellos tendría antecedentes penales con una probation incluida. Lo que siguió inmediatamente fue una tremenda golpiza de dos contra uno: además de presentar escoriaciones varias, el policía Doumecq terminó con la quebradura de sus dos piernas. Uno de sus miembros ineferiores presenta fractura expuesta y está internado en el Sanatorio Tandil. Ambas fracturas fueron producidas por los golpes desenfrenados con el bate de beisbol.

El episodio despertó la indignación de la sociedad por el demencial registro de violencia empleado, constituyéndose en una suerte de capítulo local de “Relatos salvajes”, la película argentina que ha roto todos los récords de recaudación, y cuya línea argumental se inscribe, precisamente, en hechos de la vida cotidiana donde la violencia sangrienta ocupa la centralidad del relato. Como informamos ayer, la causa quedó a cargo del fiscal, Dr. Damián Borean.

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