Policiales

Demolición involuntaria: tremendo palo en Pinto y Santamarina

13/10/2014

Un inmueble en presunto estado de demolición recibió una “manito” de una camioneta Isuzu doble cabina y un automóvil Polo. Este lunes a las ocho de la mañana se pegaron un tremendo palo. El conductor del Polo, de aproximadamente 30 años, fue internado con heridas en la cabeza. (FOTOS).

Según los primeros testimonios de los vecinos del barrio, el auto de color blanco W Polo Classic, dominio DQC 207, venía por Avenida Santamarina en dirección a Colón, y la camioneta Isuzu bajaba por calle Pinto. Nadie sabe aún cuál de los dos vehículos cruzó en rojo el semáforo de la esquina,pero la colisión resultó fortísima, pues al momento en que los conductores maniobraron in extremis para evitar el choque, sin conseguirlo, terminaron impactando el Polo y la Isuzu contra el frente de una vivienda que se encuentra presuntamente en vías de demolición.

Minutos después, uno de los tres ocupantes del Polo, un joven de buzo rojo y pantalón bordó, recostado sobre la pared del inmueble, contó a este portal de noticias que su amigo, el conductor del auto, venía despacio por la Avenida Santamarina y pasó en el semáforo en verde, pero otros testigos del choque pusieron en duda este testimonio. “Los tres muchachos salieron del auto y se ayudaban unos a otros para estar parados”, contó un vecino, refiriendo a un presunto estado de ebriedad por parte de los ocupantes del coche. Según el muchacho, el conductor del Isuzu –un hombre joven, alto y flaco- tras el impacto salió de la camioneta con los ánimos caldeados, por lo cual se habría producido un altercado con los integrantes del Polo. Se cree que también el hombre que manejaba la Isuzu fue derivado al Hospital Santamarina, con escoriaciones leves.

Una ambulancia llegó prontamente al lugar. En el paragolpes del auto había evidentes manchas de sangre, como así también la certeza de que el conductor había chocado su cabeza contra el vidrio del parabrisas, astillándolo en el impacto. “Mi amigo tenía toda la cabeza cortada y había muchísima sangre” refirió uno de los protagonistas del choque.

La Isuzu de color blanca quedó con su frente totalmente destruido tras golpear de lleno contra la pared perteneciente a una construcción antigua, la cual según vecinos estaría ya en estado de demolición. “Los muchachos le dieron una mano para terminar de voltear la casa”, dijo otro vecino que no salía de su asombro al ver como la pared se salió prácticamente de su anclaje y experimentaba una increíble rajadura tras el impacto de la camioneta. El Polo, por su parte, concluyó su alocada carrera en la mismísima puerta de la casa que tenía las persianas bajas y se halla presuntamente deshabitada.

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